En los últimos años habrás podido comprobar que, de manera puntual, distintas organizaciones lanzan campañas de recogida y limpieza de basura. Este tipo de campañas se centran en diferentes localizaciones del medio natural: montaña, playa e incluso, ciudades. Además, habitualmente, proponen un día de encuentro para la reunión de las personas voluntarias en distintos municipios. Se convierten entonces en iniciativas puntuales en las que dar visibilidad a la realidad que nos rodea.
Pero como ocurre siempre, las opiniones al respecto son variadas y, en muchas ocasiones, muy dispares. En este tipo de iniciativas, no iba a ser diferente.
Nadie duda de la dedicación desinteresada de las personas voluntarias que regalan su tiempo a la limpieza de ríos, playas y montañas. Pero algunos activistas no están del todo de acuerdo con el cómo. Desde su punto de vista, defienden que este tipo de iniciativas no son la mejor manera de abordar el problema. Según afirman, una limpieza en un día puntual no cambia la causa del problema. La marea o las personas volverán a traer cualquier otro tipo de residuos de nuevo. Se seguirán destruyendo playas, ahogando ríos y envenenando peces, aves, ballenas, etc. Argumentan que, las acciones deberían orientarse principalmente a desarrollar productos re-utilizables fabricados con materiales menos dañinos. Tampoco debemos olvidarnos de los procesos de reciclaje, que deben ser también mejorados y promocionados.
Desde @vamosahaceralgoporlatierra estamos de acuerdo con este argumento y consideramos que el problema debe ser abordado principalmente en su origen. Aunque no podemos dejar de lado esa maravillosa frase de Eduardo Galeano que se ha convertido en nuestra guía espiritual:
“Mucha gente pequeña en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas pueden cambiar el mundo”
Y en base a esto, creemos firmemente que cada pequeña basura que se retira para ser reciclada significa que hay un artículo peligroso menos para tortugas, aves o ballenas. Y quizás, un microplástico menos en nuestros estómagos. Además, estas iniciativas de limpieza fomentan la concienciación sobre la situación real de nuestro entorno natural y las consecuencias de no cuidarlo. Sirven para educar.
Crear conciencia es fundamental para comprender y actuar. Las campañas de recogida y limpieza de basura crean conciencia.
Las personas voluntarias tienen la posibilidad de observar la magnitud del problema. Visualizan el elevado volumen de residuos generado y depositado en los diversos hábitats naturales. Generan conciencia e inspiración en una gestión más eficiente de los residuos. También en la reducción del consumo de materiales nocivos. Comparten con su entorno las experiencias vividas en pro de crear una mayor conciencia a nivel mundial.
Es por eso que desde @vamosahaceralgoporlatierra nos sumamos a estas campañas de recogida y limpieza de basura con este llamamiento de concienciación ciudadana:
Nuestra propuesta implica una acción continuada. Te invitamos a que cuando visites la playa no dejes pasar la oportunidad de recoger los residuos que te encuentres. Objetos como colillas, envases, pequeños plásticos, bolsas, mecheros, etc. No se trata de un llamamiento puntual, desde @vamosahaceralgoporlatierra proponemos una campaña de recogida y limpieza de basura permanente, con el sueño de que termine transformándose en un hábito. Que cada vez que visitemos la playa, le devolvamos el favor de tantos grandes momentos vividos en ella.
Las acciones continuadas terminan convirtiéndose en hábitos. Súmate a #lagranlimpieza.
Quizás no te sorprenda saber que la mayor fuente de basura de nuestras costas son las colillas. Hecho preocupante si tenemos en cuenta que las colillas no son biodegradables. Además, las colillas están fabricadas con un material derivado del petróleo. También contienen alquitrán y nicotina, que son compuestos que se liberan fácilmente contaminando el suelo y el agua. Las colillas tardan entre 8 y 12 años en descomponerse.
Hay estudios que indican que solo una colilla es capaz de contaminar 8 litros de agua.
Además de las colillas, otro de los residuos desgraciadamente más populares de nuestras playas son los plásticos. Los plásticos se obtienen también a partir del petróleo y, al igual que las colillas, no son productos biodegradables. Sufren un larguísimo proceso hasta su desaparición total.
Una bolsa de plástico puede llegar a tardar entre 10 y 20 años en desaparecer. Un envase de plástico alrededor de 450 años y las arandelas que sujetan las latas alrededor de 400 años.
Pero el drama no termina ahí. Los plásticos se convierten, en muchas ocasiones, en grandes peligros para la fauna planetaria. Los plásticos crean trampas mortales que atrapan e inmovilizan tanto a peces como a tortugas. Además, éstos los confunden con comida, lo que les termina provocando su envenenamiento.
Con todo esto, desde @vamosahaceralgoporlatierra consideramos que las campañas de recogida y limpieza de basura voluntarias protegen la vida silvestre, crean un impulso, aumentan la conciencia y salvan los hábitats amenazados. No debemos dejar de incentivarlas y colaborar. Aunque tenemos muy claro también la prioridad de búsqueda de soluciones a largo plazo que modifique la tendencia. La contaminación de nuestros ríos y mares es un problema de gran magnitud con consecuencias globales. Y en este gran problema, la ciudadanía es crucial. Sólo nosotros podemos incentivar cambios de comportamiento y presionar a los gobiernos y empresas para que tomen medidas urgentes.
Te invitamos a que durante este verano participes activamente en este reto. Que lo hagas visible. Ya sea con el mero hecho de llevarlo a cabo, o publicando una foto en tus redes sociales recogiendo dicho momento con el hashtag #lagranlimpieza, o incluso compartiendo con tus amistades nuestro cartel. Así, estarás haciendo mucho más visible la campaña de recogida y limpieza de basura, y animarás a la participación.
Gracias por colaborar.
2 comments